Ayer martes, el comentario con mi compañero de trabajo Eduardo y algún que otro aficionado a la fotografía –Pato, por ejemplo-, fue cómo
La acotación, la excusa, la disculpa fue ‘no tenía la cámara conmigo’, y la verdad es que también hacía mucho frío y más sueño. Pero de todos modos, esa postal quedó marcada y fue –insisto- el comentario del día.
Sin embargo, hoy pude darme el gusto de ‘fotearla’ y además descubrir un nuevo amanecer sobre el Olivia, el Cinco Hermanos, Navarino y en Playa larga.
Simplemente para disfrutarlas, para verlas y animarse a ver esos colores –sumado al sonido de las aves en



Nota: Mi agradecimiento al Sr. Marino Burgos, quién me facilitó la cámara. Mil gracias...