Elizabeth Estigarribia –fotógrafa y coordinadora del grupo Cabo Domingo de Facebook- facilitó, con apenas cuatro fotos una nueva dimensión del termino “medusa” para alguien como yo… y los cientos de fueguinos sorprendidos por la aparición de una gran cantidad de medusas sobre la ría del río Grande.
Sucede que Elizabeth, fotografiando el muelle del CAP se topó con esos cuerpos gelatinosos, tomo cuatro fotos, las tocó –quizás desconociendo algún peligro- y se fue corriendo a su PC, para colgarlas en su muro de Facebook.
De ahí en más, se desató la fiebre medusa y con esto, la fotógrafa se convirtió en vocera de su propia experiencia por radios de Río Grande (UP!) y Ushuaia (Del Sur). Pasó horas y horas de lectura en Internet, tratando de conocer más sobre estos animales.
La voz de la memoria, Oscar Domingo Gutiérrez –periodista e historiador de Río Grande- aportó su granito de arena e informó a los internautas que, por playas fueguinas no se habían visto estos bichos, desde 1972. Por su parte, también en la red social, mi madre dijo que alguna vez las había visto por las playas de la ciudad.

Charla virtual con la periodista Lorena Uribe, acordamos acudir al Centre Austral de Investigaciones Científicas en Ushuaia, centro por excelencia en Tierra del Fuego y sin lugar a dudas, el lugar para evacuar cualquier duda en la materia.
Sin embargo, nada. No hay estudioso en la materia. El Dr. Adrián Schiavini me dio un dato clave. El Instituto Nacional de Investigación y Desarrollo Pesquero –INIDEP-, quienes podrían zanjar cualquier consulta al respecto.
Así fue, como logré el llamado a ese centro y donde me informaron que el Dr. Hermes Mianzan era la persona que buscaba y quien podría aleccionarnos más sobre esta inesperada visita.
¿Cómo empezó todo?
“Hace dos meses encontré las primera medusas en el cabo Domingo” dijo Elizabeth a Radio UP!. “Pero eran tres, nada más” y lo contrapuso con lo que le sucedió el miércoles pasado en el muelle del barrio CAP.
.jpg)
“Esto no es normal. Menos en estas zonas” y sostuvo que estos animales no son de estas regiones y que no se acercan a las costas ya que “es muy salina y fría”
Adriana Burgalatte, locutora, agregó que es normal ver este comportamiento “en otros lugares de la costa, como por ejemplo en las Grutas, en Mar del Plata” y se preguntó “en esta zona que es tan fría, llama la atención” estas apariciones.

Informó que las medusas son afectadas por el “calentamiento global” y las costas suben de temperatura “al calentarse, la salinidad del agua aumenta también” y es por ello de su acercamiento a la orilla del mar.
“Las medusas que están en las regiones australes, no son tan nocivas” dijo, en referencia a las consecuencias al tocarlas. “No son tan venenosas” y agregó que las medusas son “menos venenosas, son más gelatinosas que las comunes” y sostuvo solo tomó contacto con las gemas “las transparentes, porque no tienen tentáculos”

“El calentamiento global lo que hizo, en las medusas, es cambiar su ciclo reproductivo” dijo. “Ahora se reproducen más rápido que antes” cerró.
Medusas… y más medusas. En el próximo informe, la charla con Gustavo Lovrich, licenciado en biología e investigador del CONICET-CADIC y los datos aportados por el Dr. Hermes Mianzan del Instituto Nacional de Investigación y Desarrollo pesquero (INIDEP)
Las medusas (también llamadas aguamalas, malaguas, aguavivas o lágrimas de mar) son organismos marinos pertenecientes al filo Cnidaria y al de los Celentéreos; son pelágicos, de cuerpo gelatinoso, con forma de campana de la que cuelga un manubrio tubular, con la boca en su extremo inferior, a veces prolongado por largos tentáculos cargados con células urticantes llamados cnidoblastos. Se caracterizan por su movilidad, y variabilidad mesoglea. Aparecieron hace unos 500 millones de años.
Más información:
Más información: